Ayer se realizó un referéndum a lo largo y ancho de Ecuador para saber si debía eliminarse la posibilidad de la reelección presidencial indefinida en el país. Con el 98% de los votos escrutados la derogación de reelección indefinida obtuvo 64,32% para el Sí, contra 35,68% del No, en un duro revés a las aspiraciones de Rafael Correa.
En el referéndum, casi un 74% de la población votó también por la inhabilitación de cargos públicos en caso que se compruebe que las personas habían cometido delitos de corrupción.
Las 7 preguntas de la consulta popular fueron:
1. Modificación de la Constitución para sancionar “a toda persona condenada por actos de corrupción con su inhabilitación para participar en la vida política del país”,
2. Eliminación de la reelección indefinida “para que todas las autoridades de elección popular puedan ser reelectas por una sola vez para el mismo cargo”.
3. Reestructuración del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, “así como dar por terminado el periodo constitucional de sus actuales miembros”.
4. No prescripción de “los delitos sexuales en contra de niñas, niños y adolescentes”.
5. Prohibición de la minería metálica “en todas sus etapas, en áreas protegidas, zonas intangibles y centros urbanos”.
6. Derogación de la “ley de plusvalía”.
7. “Incrementar la zona intangible en al menos 50.000 hectáreas y reducir el área de explotación petrolera autorizada por la Asamblea Nacional en el Parque Nacional Yasuní de 1.030 hectáreas a 300 hectáreas”.
Durante los últimos meses Lenin Moreno, actual presidente del país, se convirtió en un feroz crítico de su antecesor, uno de los líderes del “socialismo del siglo XXI”, al que acusa desde su asunción al poder en mayo de haber derrochado la millonaria renta petrolera y de haber liderado en estos últimos años un gobierno corrupto.
Correa no solo llamó a votar contra su marginación del mundo político sino que declaró que la consulta era inconstitucional y una ruptura del Estado de Derecho. 