En el 500º aniversario de Santa Teresa de Jesús, el Instituto de Doctrina Social de la Iglesia y la Dirección de Filosofía y Teología de la UCSF brindaron una serie de charlas en homenaje a la vida y obra de esta religiosa.
Desde Alemania llegó a la UCSF el Pbro. Ulrich Dobhan, uno de los conferencistas que fueron relatando, desde su nacimiento, la vida de Santa Teresa, nacid
a en Ávila, pero predicando y enseñando, hasta más allá de su muerte, la palabra de Dios.
“Santa Teresa de Jesús fue una Carmelita del siglo XXVI, nació el 28 de marzo de 1515 y murió el 14 de octubre de 1582. Entró en la Orden del Carmen, en el Monasterio de la Encarnación en Ávila, el 2 de noviembre de 1535. Contrajo una dura enfermedad y allí comenzó con sus luchas interiores, entre dedicarse completamente a Dios, o a sus propias cosas y seres queridos”, comenzó relatando el Pbro. Dobhan.
Sobre la gran obra de esta valiente luchadora, el sacerdote alemán contó que “su primera fundación fue en San José de Ávila, el 24 de agosto de 1562. Luego siguieron otras, que fueron en total 16 ó 17. En el verano de 1567 conoce a San Juan de la Cruz, a quién convenció de que entrar en su Orden. Él como hombre se atrevió a seguir a una mujer, lo cual era algo muy inusual para la época. La siguió y así nació la rama masculina de lo que llamamos hoy, Carmelo Teresiano”.
La Madre de las Carmelitas Descalzas y de los Carmelitas Descalzos, también es patrona de los escritores católicos. A pesar de haber sido incomprendida, perseguida y hasta acusada en la Inquisición, su amor a Dios la impulsó a fundar nuevos conventos. “Aunque en 1559 estaba prohibido, Santa Teresa escribió libros espirituales, entre ellos el libro de su vida, que lo finalizó en 1566. Este libro terminó en manos de la Inquisición y las monjitas le pidieron que escriba otro, así nació ´Camino de Perfección´ con su doctrina sobre la oración y siguieron las fundaciones, que también tienen su libro. Allá por 1577 su obra se encontraba amenazadísima porque ella prácticamente se encontraba en medio del conflicto entre la reforma del Papa de Roma y la reforma de Felipe II. Finalmente superó todos los obstáculos, los monasterios fundados por ella fueron reconocidos como provincias y continuaron erigiéndose fundaciones hasta su muerte”, describió el Pbro.
Consultado sobre el significado que tiene la espiritualidad de Santa Teresa en la actualidad, el Presbítero explicó que “hoy hablamos de la oración teresiana, como un trato de amistad con Él, que sabemos que nos ama. Oración para ella no es simplemente rezar. Rezar son las oraciones vocales, y orar para ella tiene que ver con estar siempre con alguien a quien se considera amigo, no sólo en algunos momentos del día y por obligación. Dios es el amigo, hecho hombre en la persona de Jesús, y siendo Él, hombre, podemos acercarnos porque ha bajado a nuestro nivel, de manera que podemos estar con Él como si fuera uno de nosotros y al mismo tiempo, ser El Señor, Su Majestad. Santa Teresa tiene actualidad a diversos niveles: en primer lugar para El Carmelo, las monjas y los frailes, para nosotros, sus hijas e hijos; en el tema de la oración y también para la lengua española, para el castellano, porque es una de las creadoras del castellano de hoy; tiene importancia para los médicos, porque sabía y conocía muy bien la medicina de sus tiempos. En las cartas hablaba mucho de cómo había que preparar la medicina, hacer los medicamentos para poder curarse, pero siempre consultando al médico. Y también es importante para estudiar el sistema de correo, porque se supone que a lo largo de su vida escribió entre 15 y 20 mil cartas, hasta 8 por día, lo cual hace pensar en el significado y funcionamiento del sistema, porque en aquella época no existían los buzones y había que pensar en cómo hacer llegar las cartas al destinatario”.
Agregó además, que Santa Teresa “fue muy importante para la figura y el papel de la mujer, que en esos tiempos era muy marginada. Así creó en la clausura, espacios donde las mujeres podían vivir según sus propias reglas, donde los hombres no ingresaban”.
Finalmente, el Padre Ulrich Dobhan invitó a leer las obras escritas de Santa Teresa “porque cuando entras un poquito en su persona a través de ellos, siempre deja un mensaje positivo, constructivo”.