Convocado por el Rector, el Consejo Superior se reunirá para ponderar los alcances y alternativas para el retorno a la presencialidad de las actividades académicas.
Luego de conocerse la decisión del Gobierno Nacional por la cual se autoriza a las universidades el retorno a las actividades presenciales, desde la Universidad Católica de Santa Fe, el rector Mgter. Lic. Eugenio Martín De Palma, valoró como positiva la medida dispuesta por la Jefatura de Gabinete en orden a posibilitar algunas instancias presenciales para el Educación Superior; lo que no significa “una normalidad, sino un paso más en el marco de un proceso de retorno a la normalidad”.
Dado que la medida llega a pocos días de culminar las clases, y más allá de las determinaciones que tome la UCSF, todo queda supeditado a la autorización de las autoridades provinciales y locales de cada jurisdicción, el rector consideró como oportuno “ponderar la presencialidad en el marco de los exámenes, pero pensando -puntualizó- en posible presencialidad en algunas mesas de exámenes. Tenemos, además, que tener en cuenta que debemos contar con el visto bueno de la jurisdicción provincial, que a través del Ministerio de Salud, podrán ponderar si realmente en lo que hace a la provincia de Santa Fe estamos en condiciones”.
De Palma señalo que la decisión por parte de la Universidad será evaluada y definida en el marco del Consejo Superior de la UCSF, donde más allá de la cuestión académica, “debemos ponderar otras cuestiones, porque la Universidad no está aislada de otros permisos, como por ejemplo el transporte público”.
Si bien en el artículo 6 se exceptúa de la prohibición de su uso al personal directivo, docente y no docente y los y las estudiantes que asistan a las actividades académicas presenciales que se hubieren reanudado, “en el caso del transporte urbano no habría inconvenientes, pero pienso en los alumnos del interior, donde aún no está habilitado el servicio”.
Protocolos
Como otro punto a considerar, también está el hecho de evaluar “fundamentalmente en lo que es la culminación de cursados de carreras y, sobre todo, de aquellas que tienen cuestiones prácticas indispensables”, indicó el rector De Palma.
Junto a lo académico, se suman los protocolos sanitarios. Sobre esto, detalló que “así como veníamos dando turno para los exámenes virtuales, donde los alumnos se conectaban a determinados horarios, lo mismo se haría en el examen presencial para evitar la concentración de personas. Además, en el ingreso se tomarán todas las medidas correspondientes, con el alcohol en gel, la limpieza de calzados en la alfombra sanitaria, la toma de temperatura; según los protocolos aprobados. Obviamente, si una persona no está en condiciones de salud o presenta algún síntoma, se adoptarán las medidas necesarias para tomar el examen en otro momento”.
De todas manera, y más de allá de cómo avance la implementación de estas medidas, destacó: “Queremos transmitir a nuestros alumnos que no van a perder la oportunidad de poder rendir sus exámenes. Hoy ya están previstos que sean virtuales, pero estamos preparados para volver a la presencialidad, pero siendo muy flexibles en esta presencialidad que no significa normalidad”.