La nominación del Dr. Conen se fundamentó en sus méritos intelectuales, académicos y personales; habiéndose evaluado particularmente su constante e infatigable dedicación en recordar y avivar el valor y el significado que el matrimonio y la familia tienen para la persona humana y la humanidad entera.
Consultado acerca de esta distinción, el Dr. Conen señaló que “es un reconocimiento que me llena de alegría, emoción y agradecimiento sobre todo porque proviene de un Instituto de la Familia universitario que está trabajando muy bien en la promoción del matrimonio y la familia, y me honra formar parte del cuerpo de profesores de este instituto”.
En este sentido, agregó: “todo reconocimiento es un aliento a continuar en el trabajo que estamos haciendo en el Instituto del Matrimonio y la Familia de la UCSF, porque estamos convencidos de que el desafío más grande que tenemos es dar herramientas a las futuras generaciones para saber amar. Porque está probado que la raíz, la causa más profunda de los problemas personales y sociales que tienen nuestros países, como la delincuencia, la violencia, las adicciones, los trastornos psicológicos y hasta el suicidio, provienen de alguna falta de desamor”.
El gran desafío que se plantea es llegar a los jóvenes, “el Papa Francisco en su exhortación apostólica Amoris Laetitia nos está promoviendo esto, que sepamos a través de nuevos lenguajes, de nuevos medios, de nuevas acciones llegar al corazón de los jóvenes, tocas las fibras de los jóvenes, y darles herramientas para la felicidad, para la salud personal y social como es saber amar”.
Al rescate de la familia
Uno de los ejes principales desde los que trabaja Conen es la recuperación de los referentes sólidos. “En muchos países en donde se han realizado encuestas nacionales en jóvenes y en adultos y se le ha preguntado cuál es la realidad que más valoran en sus vidas, siempre surgen las familias como la principal prioridad en las personas. A nivel individual la gente tiene en claro que la familia es lo más importante”.
Y señala que, si bien a nivel individual la gente valoriza la familia, existe un problema de ideologización: “estamos asistiendo a una verdadera guerra cultural donde la ideología de género está trastocando todos esos principios básicos y permanentes y todos esos referentes sólidos que tienen y que ha tenido la humanidad, como el concepto de matrimonio, el concepto de familia, de sexualidad, de persona. Realmente trastoca todos estos referentes sólidos”.
Conen recalcó que, “a nivel político, a nivel de los que tienen la responsabilidad de gobernar no se termina de registrar que la familia verdaderamente es célula básica de la sociedad. Y esto es una especie de suicidio social, porque repito, las evidencias científicas nos están diciendo que la raíz de todos estos problemas personales y sociales que tienen nuestros países es la falta de amor de las nuevas generaciones”.
Imágenes de la entrega del Doctorado Honoris Causa al Dr. Cristian Conen
