Jordana Evelyn Duarte Martinelli es la primera mujer guaraní en recibirse de abogada y acceder a un título de grado en la Facultad de Derecho y Ciencia Política de la UCSF.
El pasado 29 de mayo, luego de rendir de manera virtual el examen de la última materia de la carrera, Derecho Internacional Privado, se convirtió en la primera abogada de la comunidad Mbya Guaraní, egresada de la Sede Santos Mártires de nuestra UCSF.
Jordana es oriunda de la aldea Tamanduá, ubicada en el municipio de 25 de Mayo (Misiones) y para estudiar en la Universidad, debió mudarse a Posadas.
“Cuando decidí estudiar Abogacía, el primer gran obstáculo que se me presentó, fue que la carrera no estaba en la universidad pública y mi familia no contaba con los medios económicos para afrontar las cuotas de una privada. Entonces mi papá, que en ese momento era Cacique, decidió enviar una nota a la Universidad, solicitando apoyo para que yo
pueda estudiar. Realmente fue un acto de Fe, más que nada. Y al poco tiempo nos respondieron que sería un honor para la Universidad recibirme”, cuenta Jordana.
Así llegó el día de iniciar el curso de ingreso: “Llegué a la Universidad y era todo nuevo para mí, no conocía nadie y por eso los primeros meses fueron difíciles. Luego, gracias a la dinámica del cursado fui conociendo gente y armando un grupo de amigos. Conocí a mi compañera de estudio, Yanet Mendieta, con quien hicimos toda la carrera a la par, preparamos todas las materias y hasta nos recibimos el mismo día”.
De esos primeros días, recuerda el apoyo de los docentes: “la mayoría sabía de dónde yo venía pero otros no, y cuando se enteraban surgían lindos debates y charlas en clase”.
Su mayor inspiración para seguir una carrera universitaria fue su abuelo, el cacique Dionisio Duarte, pionero en la lucha por los derechos de los pueblos originarios de la provincia de Misiones. Él les inculcó a todos sus nietos que continúen estudiando y ella se propuso cumplir con su sueño.
Recordando con emoción el desenlace de la carrera, la flamante Abogada cuenta: “Fueron hermosos cinco años. Hice la carrera al día, terminé de cursar en diciembre del año pasado y mi idea era recibirme en febrero, pero debido a la pandema por Covid rendí una materia en febrero y me quedó la ultima para una mesa especial en mayo. Ésta fue muy especial, porque recibirme con el Dr. Sola y la Dra. Zapata es un orgullo, son docentes brillantes. El momento fue hermoso, estoy sumamente agradecida por estos años, desde la gente de bedelía, administración, todos me demostraron mucho cariño y aportaron su granito de arena para que hoy pueda tener mi título”.
Un capítulo especial en este camino está dedicado a sus padres, quienes debieron redoblar los esfuerzos para que Jordana pueda estudiar: “Fueron los que más me apoyaron en todo este camino, principalmente porque cuando comencé a estudiar. Ambos tenían sus trabajos, pero así no alcanzaba para solventar mis estudios y debieron conseguirse un segundo trabajo. Esto nunca hubiese sido posible sin el apoyo, la contención y el esfuerzo de mis papás. Además, de que la vida universitaria no es fácil, hay muchos altibajos en el camino, y si ellos no hubiesen estado ahí para alentarme y decirme ‘hay que seguir, falta poco, lo vas a lograr’ cada vez que tenía que rendir y me largaba a llorar de los nervios, creo que no lo hubiese logrado”.
Además de la formación en cada una de las materias, Jordana se lleva un gran recuerdo de sus docentes “que me enseñaron a ser mejor persona y dejaron cosas muy valiosas en mí, como ayudar al prójimo, colaborar con el que lo necesita. Todo eso, es mucho más valioso que el título”.
Aprovechando para disfrutar en familia de este logro, Jordana comenzará a pensar en otro nuevo camino que deberá recorrer: el profesional. “Si por algo estudié fue para poder colaborar con mi Nación, con los pueblos guaraníes. Todavía no sé muy bien desde qué ámbito o especialidad, pero me encantaría hacer una especialización o maestría en Derechos Indígenas o Derechos Humanos de los pueblos originarios. También me gustaría ser docente, como los que a mí me ayudaron, me incentivaron y generaron en mí las ganas de estudiar cada materia”.