La semana pasada un ex doble espía ruso, Sergei Skripal, y su hija sufrieron un intento de asesinato con gas nervioso. El lunes, frente al Parlamento, la Primer Ministra Británica dijo que es “altamente probable” que Rusia sea responsable del ataque ya que realizado con “un agente nervioso de grado militar de un tipo desarrollado por Rusia” , además del “reciente historial de Rusia de llevar a cabo asesinatos patrocinados por el Estado”
Como el gobierno de Vladimir Putin no ha respondido a ninguna de las acusaciones, el gabinete de Theresa May ha tomado nuevas medidas: expulsó a 23 diplomáticos rusos que han sido identificados como oficiales de inteligencia no declarados y le dio una semana para salir del país. Esta decisión fue tomada en base a que, el envenamiento, amenazó las vidas de otros ciudadanos británicos en Salisbury y esto representa un uso ilegal de la fuerza por parte del Estado ruso contra el Reino Unido.
Asimismo hoy, jueves 14 de Marzo, la Cancillería británica publicó un video donde intenta demostrar un patrón en los ataques del gobierno ruso contra otras naciones. Allí se mencionan la anexión de la península de Crimea, la violación a la integridad territorial de Georgia, los ciberataques al Parlamento Alemán, a los ministerios de Defensa y exterior daneses y la injerencia en las elecciones de Montenegro. La enumeración de eventos retrocede hasta el año 2006, con el deliberado envenenamiento de Alexander Litvinenko (oficial fugitivo del Servicio Secreto ruso) en Londres.
