Así lo sostuvo el Arq. Mario Daniel Melgarejo, docente del área de Historia de la carrera de Arquitectura, en la UCSF sede Santos Mártires, al referirse a la importancia que adquiere comprender, desde la instancia de formación, el valor de las obras en su contexto y aportes culturales, históricos y sociales en la comunidad.
Misiones es una provincia con una gran riqueza cultural. Su historia atraviesa y se inscribe en espacios, costumbres y relaciones, evidenciando rasgos de los procesos de colonización e inmigración hasta la actualidad.
Recorrer su geografía, en muchos casos, exige al mismo tiempo hacerlo con una perspectiva histórica: hay obras que se observan de otra manera si vemos más allá. Lo que las trasciende es su valor.
Desde la Universidad Católica de Santa Fe, a través de su Facultad de Arquitectura y Diseño, y especialmente, desde propuesta académica, se promueve una formación integral con vinculación a la comunidad local del estudiante. Es por eso que en la sede Santos Mártires –ubicada en Posadas, Misiones- se aborda la Historia de la Arquitectura con un fuerte hincapié en el acervo cultural de la región que, además, se destaca en este aspecto.
“Al principio, puede resultar un poco tedioso para el alumno la Historia de la Arquitectura, pero cuando se van interiorizando y comprendiendo que las obras trascienden lo material y que su inserción en el contexto histórico les da fundamentos, lo empiezan a valorar y a incorporar de otra manera”, expresó el Arq. Mario Daniel Melgarejo, docente del área de Historia de la carrera.
En este sentido, agregó que “la cuestión patrimonial es muy importante y por eso lo abordamos en la carrera. Es necesario amplificar el mensaje y que salga del ámbito de la Facultad; porque en definitiva es la comunidad la que se tiene que sentir identificada con ese patrimonio”.
Patrimonio global
Misiones cuenta con obras declaradas a nivel internacional, además de nacional y provincial; siendo una gran fuente de estudio y aprendizaje para muchas profesiones.
Por ejemplo, las Misiones Jesuíticas, que son Patrimonio de la Humanidad por parte de la UNESCO. Al respecto, el Arquitecto comentó que “es interesante ver cómo en un mismo periodo, el de colonización, se construía de una manera en Europa y, en nuestro territorio, de otra muy distinta. Esto es por la importancia del clima de los lugares y de los recursos, es decir, que hubo una creatividad muy grande por parte de los jesuitas para darle uso a los elementos y su contexto como así también una gran sensibilidad de los pueblos originarios por comprender esas indicaciones y adaptarlas su realidad, respetando los fines”.
Actualmente, se habla mucho de la arquitectura bioclimática, de ese equilibrio y armonía que debe haber con el medio ambiente, pero ya en aquellas épocas estaba presente el concepto de incorporar las obras a su entorno.
De los tantos patrimonios arquitectónicos que tiene Misiones, también se puede mencionar a la Casa de Gobierno, u otros más recientes que corresponden al Patrimonio Moderno (por no alejarse de los 70 años), como la Escuela N°1 de Leandro N. Alem, el edificio del Correo Argentino y el originario del Instituto de Previsión Social, estos dos últimos ubicados en pleno casco céntrico de la capital provincial.
En cada municipio, es necesario contar con profesionales que protejan estos espacios, orienten políticas de cuidado y conservación, y defiendan su esencia; potenciando el aporte cultural que pueden realizar a las comunidades.
Es por eso que desde la carrera de Arquitectura de la UCSF se habla no sólo de los monumentos y edificios en núcleos urbanos, sino de aquellos patrimonios intangibles. En todos los casos, forman parte de un pasado necesario de ser comprendido para las realidades actuales.
Su permanencia y puesta en valor permite profundizar los estudios, con un grado de valor documental importante para la identidad local.
Conciencia y salvaguarda
El arquitecto, en este contexto, amplía su espectro de conocimiento integrando otros aspectos que pueden resignificar la práctica, espacios o dotar de características únicas a sus ideas y posterior realización.
“Cuando los alumnos son conscientes del valor patrimonial de muchas obras de Misiones, verdaderamente ellos mismos se empiezan a convertir en defensores”, resaltó el docente Mario Melgarejo.
También es fundamental la concientización de que, si bien está en plena vigencia la defensa del patrimonio arquitectónico desde la Facultad y otros ámbitos, muchos bienes han desaparecido o han sido alterados significativamente; por ejemplo, la Comisaría de Santo Pipó en 2013, obra del reconocido arquitecto Clorindo Testa o el Instituto de Previsión Social de Posadas, en 2008. Además, existe actualmente un patrimonio en peligro, en un estado de abandono avanzado, como el Hotel Savoy en Posadas y un caso de desaparición inminente, como la estación se servicio del A.C.A. (1943) en Oberá, obra del Ing. Antonio Vilar y pionera de la Arquitectura Moderna en Misiones.
Los motivos de esta situación tienen que ver con la falta de protección legal de los bienes mediante una declaratoria patrimonial (al menos a nivel municipal) y con el desconocimiento, tanto del público en general como de las autoridades que toman las decisiones que muchas veces deciden el destino de los edificios. Es por ello tan importante que desde la carrera de Arquitectura de la UCSF se formen buenos profesionales y defensores del patrimonio que forma parte de su propia realidad.