Por el Doctor en Medicina, Médico, vicerrector Académico de la Universidad Católica de Santa Fe, Guillermo Kerz. Integrante Consejo Provincial de Niñez y Adolescencia de la Provincia, por la UCSF y la Licenciada en Psicología, Ana Luisa Natta, delegada del Rector en la Facultad de Psicología de la UCSF. Integrante del Consejo Provincial de Niñez y Adolescencia de la Provincia, por la UCSF.
Los primeros mil días son clave en la vida de un niño o niña, es por eso que en cumplimiento con el artículo 14 de la Ley 26.061, de protección integral de los derechos de niños, niñas y adolescentes, y el llamado de UNICEF a “todos los gobiernos para que inviertan más en políticas que brinden a las madres y padres, el tiempo y apoyo que necesitan para cuidar a sus hijos” se presenta “1000 días para toda la vida”. Además de sensibilizar, esta campaña brinda herramientas para lograr la estimulación, los cuidados y la protección esenciales para esta etapa, ya que es en el hogar donde se encuentran los actores claves para el mejor desarrollo de los bebés durante el embarazo y de sus primeros dos años.
El concepto de los 1000 días es una convocatoria a la acción, ya sea a través del cuidado del embarazo, la promoción efectiva y personalizada de la lactancia materna, así como a la adecuada, oportuna, nutritiva y variada alimentación complementaria. Este concepto requiere del compromiso de la familia y la sociedad.
El objetivo de crear conciencia entre madres, padres y adultos responsables del cuidado de niños y niñas sobre lo determinante que es la etapa de la primera infancia para el resto de la vida. Además de sensibilizar, es importante dar herramientas para lograr la estimulación, los cuidados y la protección esenciales para esta etapa, ya que es en el hogar donde se encuentran los actores claves para el mejor desarrollo de los bebés durante el embarazo y de sus primeros dos años.
Cuando el niño o niña recibe estos cuidados tiene más posibilidades de sobrevivir, de crecer de una manera saludable, de desarrollar plenamente su capacidad de pensamiento, verbal, emocional y sus aptitudes sociales. Eso significan esos 1000 días para toda la vida.
(UNICEF, 2016)
Según el CESNI (Centro de Estudios Sobre Nutrición Infantil), los 1000 días críticos están comprendidos entre la concepción y los dos años de edad, y son trascendentales para la expresión del potencial de una persona, y en consecuencia para la conformación del capital humano de una sociedad.
Lo novedoso radica en la contundente evidencia disponible a escala global dónde queda demostrado que la implementación efectiva de intervenciones en el cuidado de la mujer en edad fértil, lactancia, y los primeros años de vida de los chicos, cambian y robustecen el desarrollo afectivo y emocional como precursores de la capacidad de aprender en la escuela, y de vincularse con los otros y de insertarse productivamente en la sociedad. Vemos así, la evolución permanente en la continuidad del desarrollo de la vida del niño/a hasta la adultez. Como sociedad nos lleva a interpelarnos y a tomar conciencia que el niño de hoy es el adulto del mañana.
Se transforma en un imperativo necesario tomar conciencia que la mayor parte de los problemas nutricionales más prevalentes en nuestro país, como el retraso crónico del crecimiento (8%), las deficiencias específicas de micro nutrientes (10% y 30%) y la obesidad (20% y 45%), tienen sus orígenes en esta etapa. A su vez, éstos tienen consecuencias sobre la salud, la carga de enfermedades y el rendimiento escolar, entre otros.
Otra particularidad es que los 1000 días transcurren en una ventana muy estrecha de tiempo, en que nuestros genes se encuentran abiertos para leer señales del medio ambiente –tanto positivas como negativas– que modulan el capital genético. Esta flexibilidad “epigenética” tiene consecuencias para el resto de la vida y especialmente en las niñas, que se refleja en la siguiente generación.
Implementación efectiva de cuidados a la mujer embarazada
En nuestro país el cuidado de la mujer embarazada no está limitado por el acceso al sistema de salud, ni en el subsector público ni en el privado o social, pero es crucial que la atención sea temprana y efectiva. El control adecuado de la progresión de peso gestacional adquiere especial importancia hoy, dado que alrededor de la mitad de las mujeres adultas padecen exceso de peso (sobrepeso u obesidad).
Se sabe que la obesidad al comienzo del embarazo aumenta el riesgo de complicaciones y de cesáreas, duplica el riesgo de bajo peso de nacimiento, así como el alto peso de nacimiento. A su vez, se ven altos riesgos de diabetes gestacional, como así también la disminución en la tasa de inicio de lactancia y el incremento de su abandono temprano.
Prevenir es cuidar
El riesgo de un estado nutricional deficiente, comienza ya en el vientre materno, y durante los primeros 1000 días de vida pueden ocurrir los daños más graves al estado nutricional, con efectos duraderos en edades posteriores de la vida y también generacionales.
La nutrición y adecuada alimentación de la niño/a comienza en el embarazo
Este es un momento de grandes cambios en muchos aspectos: cambios físicos y cambios emocionales por los cuales va pasando la mujer junto al bebé que lleva dentro. Cada embarazo es único y el modo en que se lleva adelante tiene mucha importancia para el futuro del bebé. Una correcta alimentación, contribuirá a disminuir el riesgo de bajo peso al nacer, prematurez, deficiencias nutricionales de la madre y el bebé, etc.
El control prenatal es fundamental para generar un espacio que le permita a la mujer manifestar sus dudas, miedos y preocupaciones
Se trata de un momento importante para compartir información que le será útil tanto durante el embarazo como después para el cuidado de su bebé. Representa una ventana de oportunidades, ya que la mujer embarazada se encuentra mucho más receptiva a los consejos e indicaciones del equipo de salud. Es el momento oportuno, para mejorar el estado de salud materno y preparar a la mujer para cursar una gestación adecuada. En caso de obesidad o sobrepeso de la mujer, se debe lograr un peso adecuado y alcanzar una alimentación saludable.
Cabe destacar que los cuidados prenatales durante el embarazo y el control temprano y periódico, son fundamentales en la prevención el consumo de sustancias tóxicas como el alcohol, cigarrillo, marihuana, cocaína, etc.
Actualmente, el sector correspondiente a la salud privada cubre a la embarazada desde el momento en que los test de embarazo dan positivos (algunos antes de la falta menstrual y otros a partir de las primeras 48 horas de atraso), en tanto la obra social de la provincia de Santa Fe (IAPOS) a través de su Plan Materno Infantil hace lo propio a partir de las 12 semanas.
En este marco y a partir de la propuesta 1000 días para toda la vida del Consejo Provincial de Niñas, Niños y Adolescentes, el Ministerio de Salud de la provincia de Santa Fe elevó al IAPOS el pedido de ampliación del Plan Materno Infantil desde la confirmación del embarazo con las consultas preconcepcionales.
Esta equiparación del sector público con el privado, con medidas anticipatorias, enfocadas en la promoción y protección de la salud, permitirá una planificación adecuada del embarazo, y con ello un futuro mejor para la madre, y los niños y niñas.